viernes, 23 de agosto de 2013

Vuelve al corazón

El corazón es un símbolo totalizante de la persona, el núcleo más íntimo y más auténtico, lo mejor de ella. El corazón es la persona en su identidad pero también en su sensibilidad y capacidad de verse afectada por lo que le rodea.

El corazón es la fuente de la ternura.

La palabra corazón es un término antropológico importante en el Antiguo Testamento y se aplica sobre todo al ser humano. Aparece 814 veces. Pero hay algunos textos en los que habla expresamente del corazón de Dios (26 veces), todos ellos en relación directa con el ser humano.

El ser humano es la gran preocupación del corazón de Dios, es la debilidad del hombre la que hace que Dios se vuelque sobre el.

El ser humano puede ser tierno porque está hecho a imagen de su Dios. Por eso se ha podido decir que "la ternura es lo más humano de Dios y lo más divino del hombre" (Roccheta).

Volvamos la mirada al corazón, escudriñemos sus entrañas y dejemos fluir el agua pura de la ternura que nuestro mundo necesita.


No hay comentarios:

Publicar un comentario